En el estadio Santiago Bueras, La Serena gana a Santiago Morning por 2-1 y aguanta con todo el resultado. En una de las casetas del estadio, el relator de Radio Madero, Jaime Valdovinos (50), no puede más con un resfrío y los nervios. A ratos su relato tiene tinte de heroico. Una verdadera arenga. “Estamos sufriendo hasta decir basta, nadie dijo que esto sería fácil”. “Terminémoslo aquí (refiriéndose al árbitro)… que termine el partido”, insiste con desesperación. “Tranquilo, Mauro (Salazar), quédate arriba”. Al final termina el encuentro y los granates ganan el partido y Valdovinos parece respirar tranquilo. Tarea cumplida y destaca la opción de ‘meterse’ en la liguilla.
No tiene tapujos en reconocer que cuando relata un partido de Club Deportes La Serena lo hace no sólo con pasión por la actividad, sino que también por su cariño al club. Está consciente de que a lo largo del relato se le nota, pero no le complica.
Lleva más de 20 años en la actividad que le ha permitido recorrer todo Chile y seguir a la selección nacional en el exterior en algunos partidos, aunque su sueño sería acompañar al club granate en la Copa Libertadores de América.
Su profesionalismo fue reconocido en el mes de agosto de 2015 con la medalla Ciudad de La Serena, donde fue clave su pasión por el cuadro ‘papayero’.
Admite que fue una sorpresa, sobre todo cuando la gente lo propuso. Su nombre fue instalado en las redes sociales por los propios hinchas. “Los auditores de Madero Deportes”, destaca con orgullo.
Nunca pensó que fuera una broma. Incluso en un principio admite que estaba conforme con que su nombre hubiese sido instalado. Pero al final consiguió el premio mayor.
Sus inicios están ligados al programa Hora Deportiva de radio América a finales de la década de los ’80. De hecho, reconoce la oportunidad que le dio el periodista Claudio Ilabaca Sáez.
La partida fue a pulso. “Tirando el cable en el estadio Nicolás Chahuán de La Calera”, rememora.
La Serena estaba revolucionada con las volteretas de Víctor Pititore Cabrera y la clara opción de volver a la primera división. Los tiempos cuando el entonces alcalde de la capital regional, Lowry Bullemore Castro, y el empresario Otmar Rendic se habían transformado en la dupla fuerte de la dirigencia de los granates.
La medalla Ciudad de La Serena tuvo un sentimiento especial para Valdovinos. Rápidamente que lo supo se lo comunicó a su madre, la que lamentablemente no alcanzó a ser testigo cuando la recibió en la Plaza de Armas. Falleció semanas antes. “El que lo propuso en el Facebook fue Osvaldo Pizarro, no lo conozco, pero es un hincha de Deportes La Serena. Pero también está el profesor Sergio Pizarro, quien lo hizo en forma oficial y luego apareció mi compañero Héctor Fábrega y Juan Ortiz, de la Corporación de Deportes La Serena”.
Reconoce que siempre fue hincha de Deportes La Serena. Incluso mucho antes de ingresar a las comunicaciones. Paralelamente practicó fútbol en el ámbito amateur, en el equipo de Santa Lucía en el sector Antena. Pero también juega tenis y lo comenta. Incluso, en la radio América a principios de los ’90, relató el boxeo en una jornada memorable en la calle México en el sector Las Compañías.

DESDE EL CEMENTO
A LA CASETA
La primera vez que concurrió al estadio La Portada lo trajeron su padre y madre. “Cuando se venía con canastos con huevos, había que llegar en la mañana y la fila para comprar la entrada empezaba en la boletería de calle Balmaceda y terminaba en el Cuerpo de Bomberos y ahí comencé a ver a Club Deportes La Serena, con Orfel Cortés en el arco, el “Negro” Soza en la defensa, Juan Koscina y Sergio Ahumada, cuando el estadio se llenaba y la gente se sentaba en jabas de cerveza”, recuerda.
Reconoce que nunca pensó estar en una caseta relatando. Su referente fue Horacio Miranda Droguet, “sin lugar a dudas y con autorización de su hijo Marcelo, yo digo la frase ‘la pelota terminó su marcha en la red’ que era de Horacio Miranda y lo tomé a modo de homenaje y para reconocer y recordar al más grande relator que hemos tenido en la zona”.
Incluso, estuvo a punto de trabajar con él, “me llamó en una oportunidad”.

-¿Actualmente puede vivir del relato?
“Es muy difícil”.

Desde su primera incursión ha tenido un periplo por diferentes emisoras. “He estado casi en todas las radios. Los recuerdos de Calera fue cuando estuve en el programa de Superdeportes de Agricultura, quizás el espacio más escuchado en ese momento, donde el director era Guillermo Omar Olivares. Después de ahí me fui a la radio América, a Hora Deportiva con Claudio Ilabaca, Carlos Roa y Carlos Palacios (fallecido)”.
Fue la época donde estrechó amistad con el relator Jaime Ulloa, quien también lo marcó como profesional. Fue el momento cuando su carrera comenzó a consolidarse como relator. A principios de los ‘90 estuvo en el equipo que debutó en transmisiones deportivas en la FM. Habían arribado a radio El Faro integrando el equipo de Faro Deportes. “Ahí me molestaban con que cómo con esta voz de pito podría estar en una radio FM y después vino un periplo por diferentes radios”.
Recuerda su paso por la radio Color (Morena), Coquimbo Stéreo y Chilena. “En la radio Chilena tuve una experiencia dulce y una de agraz como es la vida y el fútbol. Enfrenté un problema de bastante mal gusto que casi prefiero no recordarlo. Después fuimos a la radio Gabriela Mistral donde arranca Golazo, con la dirección de Mauricio Brown, que es el programa más antiguo que existe actualmente y después nos vamos a la radio San Bartolomé ,con la dirección de Carlos Rivera. Estuve 11 años y fue la primera vez que una radio local hacía una transmisión internacional. Fuimos a Montevideo a ver jugar Chile-Uruguay, aunque nos fue mal, y actualmente estamos en la radio Madero”.

-¿La alta rotación de integrantes en los programas pasaría por el tema económico?

“Acá un medio de comunicación no es para vivir. En el caso de las personas del ámbito deportivo, el 90 % tiene su trabajo particular. El mismo Horacio Miranda trabajaba en la Dirección de Aguas. En mi caso laboro en una empresa agrícola, que me permite viajar”.

-Cuando viajan fuera lo hacen con recursos propios o con el club, hipotecando la independencia?

“Con recursos propios y el apoyo de empresarios amigos. Cuesta mucho solventar un programa deportivo, tampoco los equipos no acompañan mucho (La Serena y Coquimbo están en segunda división)”.

-Pero ¿no debieran cubrir otros deportes y no solamente fútbol?, esa es una de las mayores críticas que se les hace a los espacios deportivos…

“ A ver, nosotros nos preocupamos de todos los deportes y básicamente en el regional; y nos hemos preocupado de tener siempre una persona de una disciplina distinta”.

-¿Cuánto le ha complicado que lo tachen de demasiado serenense, sobre todo cuando se sostiene que un relator debe ser lo más independiente posible?

“No me aproblema, aunque cuando empecé en el medio de comunicación eso era muy fuerte. Había que tener cuidado en demostrar que se era de una camiseta u otra, lo reconozco en una vieja guardia. Pero eso cambió. Mi referencia hoy es Ernesto Díaz Correa (Cooperativa) y cuando a Chile le convierten un gol, él no lo grita. Creo que es identidad y que no te hace perder la objetividad”.

-Pero, ¿está consciente de que La Serena está al lado de Coquimbo y lo pueden cuestionar…?

“Está bien, pero nos dividimos. Morgado (Rodrigo) transmite los partidos de Coquimbo Unido y a mí me corresponden los de La Serena. Pero no tengo problema en mostrar mi identidad, el problema es cuando se pierde. Cuando La Serena juega mal lo digo, lo mismo cuando señalo que no mereció ganar. Yo le relato al hincha de la ciudad de La Serena, pero tengo mucho respeto por Coquimbo Unido y nunca he sido peyorativo con la gente del puerto”.

FRONTALIDAD
Aunque su identificación es clara con Deportes La Serena, lo que es valorado por los hinchas, su frontalidad cuando las cosas no andan bien, también le ha jugado malas pasadas. Aún se recuerda el enfrentamiento que tuvo por las redes sociales con el gerente Claudio Daud, cuando Valdovinos propuso bajar las entradas como una forma de elevar la cantidad de público en La Portada, lo que provocó el cuestionamiento del dirigente y deslizó que el relator poco sabía de números. “No tengo ningún problema con el señor Daud (Claudio), no lo conozco. Fui amigo de su padre y su primo, que lo dirigí en el fútbol amateur. Lo vi una vez en una conferencia de prensa y estuvo todo el rato con la cabeza gacha y nunca miró a los ojos. Le contesté porque me emplazó con nombre y apellido y coloqué la cifra en las redes sociales (cuánto gana en el programa) para mostrar transparencia y para que viera que esto tiene más de pasión y vocación. Porque dijo que con lo que yo ganaba hablando de Deportes La Serena, apoyara a los hinchas y en mi caso sí los he respaldado cuando se portan bien”.
No esconde que en más de una oportunidad ha pensado en abandonar el relato. “He dicho que este es el último año”.
-¿Por el poco apoyo publicitario?
“No, son muchos años, además que mi pasión ha sido dirigir técnicamente al Deportivo Casa Verde, que es un club con 26 títulos”.

SUEÑOS DE FAMILIA
Durante sus más de dos décadas ligadas a los programas deportivos ha recibido el apoyo de su familia, sobre todo de sus hijos. El mayor es estudiante de enfermería (UCN) y ligado al fútbol, pero se ha dedicado más a la parte técnica. “Pero mi otro hijo, Milton, sueña con ser relator y es mi centro estadístico. No necesito ir a internet para conocer un dato”.
-¿Le hubiese gustado haber extendido la carrera en Santiago?

“Nunca he querido salir de La Serena. Cuando digo que esta ciudad es la más linda de Chile es porque es así y porque lo pienso”.

Junto con el estilo apasionado, Valdovinos cierra su relato con un sello propio. “Soy Jaime Raúl, el de Santa Lucía”.

“Ahí nací, la población se llama Santa Lucía y nunca me he olvidado y los ‘cabros’ así lo han reconocido. De hecho, con esto de la medalla (Ciudad de La Serena) lo dije. Es un reconocimiento para estas poblaciones que son un poco estigmatizadas, siempre digo que vengo de este tipo de población”, enfatiza con orgullo.
 

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Fuente: diarioeldia.cl