Celos habrían llevado a hombre a matar a su esposa ovallina y a sus dos hijas

 
Familia de las víctimas asegura que Fraulein Alfaro, asesinada el miércoles en Santiago con sus dos hijas, habría ido perdiendo el contacto con los suyos producto de lo posesiva que era su pareja.

En busca de un sueño hace ocho años había emigrado a Santiago, donde sólo encontró la muerte.
Fue el miércoles cuando se conoció la tragedia de la ovallina Fraulein Alfaro Díaz (38), quien ese día fue brutalmente asesinada junto a sus dos hijas, de 2 y 7 años. ¿El principal sospechoso? La pareja y padre de las víctimas, un sujeto de 47 años, quien hasta el cierre de esta edición se encontraba prófugo y continuaba siendo intensamente buscado por la Policía de Investigaciones.
Aunque las causas que llevaron al individuo a cometer el femicidio y doble parricidio aún no son esclarecidas, según trascendió, habrían sido los celos enfermizos del sujeto los que los que dieron lugar a este nuevo hecho de sangre, que ha estremecido a la capital de Limarí.

EL DOLOR. Consternación. Con esta palabra se puede definir lo que siente la familia de Fraulein Alfaro y sus dos pequeñas, quienes ayer por la tarde recibieron los cuerpos de las víctimas, los que hoy serán sepultados en el cementerio municipal de Ovalle.
Es que nunca imaginaron que sus vidas terminarían de esta manera, y estaban orgullosos de los logros que había conseguido Fraulein, quien a punta de esfuerzo, había obtenido el título de trabajadora social en la Universidad Mariano Egaña. En ese momento ella vivía sola con sus progenitores. Tenía otros tres hermanos por parte de padre, pero éstos residían en el norte del país, en Copiapó.
Fue sólo unos meses después de egresar de su carrera cuando decidió emigrar a la capital en busca de un mejor futuro. Todos la apoyaron y más aún cuando al poco tiempo encontró al hombre de su vida con quien contrajo matrimonio e iniciaron una vida juntos cuando llegaron sus hijas.
Aparentemente todo iba bien. La mujer se consolidaba, personal y laboralmente. Sin embargo, su relación con su familia ovallina poco a poco se enfriaba, perdía el contacto y según relata su prima hermana Jacqueline Aguilera, aquello se debería precisamente a lo “posesivo” que habría sido el esposo Fraulien, quien sencillamente “la absorbía”. Pero pese a los problemas que tenían en la interna, nunca los demostraron. De hecho, hace unos años, cuando el sujeto acompañó a su mujer al funeral de su madre, la propia Jacqueline tuvo la oportunidad de conocerlo y su primera impresión fue positiva. “Se veía preocupado, buen padre. Me acuerdo que apoyó mucho a mi prima en ese momento”, comenta.
Pero hoy ya no tiene dudas. Esa aparente calma en la que vivían habría sido sólo “una pantalla”, ya que en los últimos años, la relación habría ido empeorando cada vez más. Incluso, según relata su prima, ella se habría enterado de que las amigas que habían querido comunicarse con ella, no habrían podido hacerlo con toda calma. “Ella tenía que hablar bajito, como si alguien la estuviera vigilando, o como si tuviese miedo”, afirma Jacqueline, quien todavía no se convence de lo que sucedió y que hoy, al igual que gran parte de la comuna limarina, dará el último adiós a Fraulein, con dolor, pero con la esperanza de que la justicia llegue.

Fuente: diarioeldia.cl