Momentos de horror vivió la familia Toro Ramírez del sector Pan de Azúcar en Coquimbo, posterior a que una turba de antisociales atacaran su hogar tras concluir un partido de fútbol amateur disputado frente al domicilio. Esto dejó a los moradores con heridas de diversa consideración, quienes hoy piden justicia y mayor seguridad para la zona rural de la comuna puerto.
Según relataron los afectados por el hecho de violencia a diario El Día, durante la tarde del domingo se enfrentaron los equipos Nacional de Pan de Azúcar y Unión Santos de Cerrillos; encuentro que dio vencedor al primero de los clubes deportivos, originando así la molestia del equipo contrario. En ese momento algunos de sus simpatizantes comenzaron a quebrar botellas frente al citado domicilio, cuyos restos de vidrios dieron en el rostro de una menor, ocasionándole heridas y la reacción de sus familiares.
Fue así como inició una discusión, donde unos 30 individuos comenzaron a arrojar piedras y botellas hacia el hogar de la familia Toro Ramírez, quienes al intentar contener a la turba para impedir su ingreso a la morada, resultaron con heridas y contusiones a causa de las pedradas y botellazos. Por ello debieron recurrir a la presencia policial y posteriormente al recinto de salud de local, donde constataron lesiones en tres integrantes del núcleo familiar.
Diario El Día fue al lugar, y allí pudo dialogar con Juan Toro, principal afectado por el hecho de violencia contra su familia y domicilio, quien además es presidente de la junta de vecinos Unión Venus, de Pan de Azúcar. Con una mano inflamada y una herida cortante en su abdomen, este hombre relató los dramáticos momentos que vivió, junto a su esposa, hijos (as) y nietos.
“Sentimos a mi nieta gritar a causa de los vidrios que cayeron a su rostro cuando estaba en el antejardín, y nos dimos cuenta que varios individuos reventaban botellas fuera de nuestro hogar. En ese momento pedimos explicaciones y una turba de hombres bebidos y drogados se fue contra nuestra casa y familia. A mi hija mayor le ocasionaron heridas en su brazo y a mi nieta en su rostro, mientras que a mí, me golpearon en el cuerpo y con botellas en el abdomen. Fue algo terrible”, señaló Juan Toro.
El poblador de Pan de Azúcar estampó la denuncia en Carabineros y dijo haber identificado a los agresores, por lo cual, dará inicio a acciones legales contra quienes dañaron sin motivo a su familia. “No es posible que esto quede impune y que la gente sea violenta con quienes se les dé la gana. Por suerte la cosa no pasó a mayores, ya que habría sido aun más lamentable”, aseguró.
Problemas sociales y graves
Ya lo advertía Juan toro en su relato, el consumo de alcohol y drogas entre quienes presencian encuentros deportivos amateurs es algo común, pero esto se está expandiendo en las poblaciones del sector rural de Coquimbo. En Pan de Azúcar, la venta de sustancias ilícitas está en franco incremento, dando paso a una serie de problemas sociales que son denunciados por los vecinos.
Sobre ello dialogamos, con Marcos, habitante del sector Venus de Pan de Azúcar, quien no dio su apellido por temor represarías. “Es terrible ver como la juventud principalmente se está perdiendo en la droga. La “pasta base” prácticamente se vende en todos los sectores que componen Pan de Azúcar y hasta en los encuentros deportivos, siendo facilitado por la escasa presencia policial. Aunque Carabineros hace su trabajo, no da abasto; los robos son comunes, y ahora los asaltos y la violencia están a la orden del día”, afirmó.
Estos dichos fueron respaldados por el mismo Juan Toro, vecino afectado por el hecho de violencia expuesto con anterioridad, quien en su condición de dirigente social de Pan de Azúcar realizó un llamado a las autoridades a enfrentar las problemáticas de inseguridad que afectan a la comunidad, y a detectar e impedir la comisión de ilícitos como la venta de drogas.
“Está el compromiso de contar con un retén de Carabineros en el sector El Peñón, lo cual fue un compromiso que el alcalde hizo nosotros y esperamos que se cumpla. Hace mucha falta una mayor presencia de policía especializada en drogas y que frene el creciente consumo y venta de estas. Nuestra localidad de Pan de Azúcar está dejando de ser el lugar tranquilo que alguna vez fue, y eso es lamentable para todos quies habitamos acá”, concluyó Juan Toro. 4802i
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Fuente: diarioeldia.cl