Desde que perdió la elección en la Asociación Nacional de Fútbol Profesional a finales del 2010, Harold Mayne-Nicholls ha ocupado su tiempo en sacar adelante el proyecto de su fundación Ganamos Todos para incentivar el deporte, pero principalmente para alejar a los jóvenes del peligroso aumento de la obesidad.

Entre medio lanzó un libro con fotografías sobre canchas de fútbol a lo largo del país y debió salir al paso de los rumores respecto de un supuesto interés en una carrera política y el coqueteo con la presidencia de la FIFA.

Los tres últimos días ha estado en la Región de Coquimbo dictando la conferencia Liderazgo en Tiempos Actuales, organizada por su fundación, aunque tanto el público y los medios han centrado su interés en su posición frente al nuevo escándalo que remece al fútbol chileno.

En entrevista con diario El Día no elude la contingencia, pero se explaya en las satisfacciones que le ha significado trabajar con menores.

Destaca que optó por crear la fundación como una forma de retribuirle a la gente “todo lo que nos ayudó para sacar adelante el fútbol chileno y que era incorporar a más jóvenes a la actividad física del país, porque tenemos graves problemas de sedentarismo y desintegración social”.

La institución está próxima a cumplir cinco años y destaca el apoyo de las distintas empresas,“tenemos el slogan que donde nos inviten vamos, no nos fijamos si es cerca o lejos o si hay riqueza o pobreza y vamos con distintos programas y la idea es que quede un legado, no sólo que los niños jueguen”.

Iván Zamorano lo intentó con la Ciudad Deportiva, sin embargo, enfrentó problemas financieros, ¿no teme que le ocurra algo similar?

“Lo que pasa es que esto depende del compromiso social que tienen las empresas con sus comunidades. Si destinan un porcentaje de su presupuesto a esto entra nuestro proyecto y muchos más. Si vuelven nada más que a producir evidentemente que proyectos como el nuestro se debilitan porque cuesta mucho sacar los fondos, aunque también podríamos llegar a los recursos fiscales, pero hay una gran diferencia”.

¿Esta es su apuesta personal?

“Sí y la presido y hemos hecho proyectos desde Visviri por el norte hasta Puerto Williams por el sur y seguimos muy entusiasmados. Ahora, no es por lo que hacemos que habrá un cambio en las tasas de sedentarismo, pero vamos a contribuir y si a eso se le suma el aparato estatal y el entorno de los municipios se logrará revertir las cifras de sedentarismo”.

¿La apuesta también es infraestructura o sólo capacitación?

“También hemos hecho, pero ahí hay más expertise, pero si viene una empresa cualquiera y desea construir algo y nos pide asesorarla, lo hacemos”.

¿Cuáles son las metas futuras?

“La meta principal la cumplimos, que es estar en todas las regiones del país. La segunda es ir viendo cómo los niños van dejando atrás el jugar solos y la tercera meta es ver cómo a través de estos proyectos el Estado chileno se da cuenta de la importancia de la actividad física para nuestros jóvenes e incorpora mayor cantidad de horas de educación física dentro del programa, pero eso es de largo aliento”.

Pero en su momento de la ANFP logró convencer a la Presidenta Bachelet para que se involucrara en la construcción de estadios…

“ Sí y fue uno de los logros. De hecho, el siguiente Gobierno lo continuó”.

En este caso, ¿su fundación ha ido a La Moneda para promover el proyecto?

“No fuimos con los mandatarios, sino que con funcionarios, pero ellos tienen sus propios programas. He leído mucho lo de la Reforma Educacional, pero hasta el día de hoy no encuentro una línea que diga que en cuanto a la actividad física de los niños vamos hacer esto”.

¿No cree que una vía para lograrlo era intentar postular al Parlamento, por ejemplo, en un distrito de Antofagasta?

“No, ahí hay un error grande, a mí nunca me ha interesado ese tema, no digo que no me vaya a interesar mañana. Se me acercaron los partidos políticos a decirme que en todas las encuestas aparecía en Antofagasta muy bien posicionado. Ahora de nuevo me llamó un partido político para que fuera candidato a alcalde en Viña del Mar, pero le dije qué voy a hacer en Viña, no conozco la ciudad ni soy de allá, pero les manifesté que la política no es un tema de encuesta”.

¿Pero ser alcalde no le permitiría desarrollar con más fuerza estos programas?

“Claro, pero la responsabilidad va mucho más allá. El ser alcalde realmente involucra tener un contacto con la comunidad”.

O no se involucra porque lamenta el momento que vive la política actualmente, sobre todo el desprestigio…

“Lamentablemente, se ha perdido por faltas propias, porque la gente ha visto el actuar de algunos. Siento que para hacer algo en la vida tiene que tenerse una pasión y yo en la política no tengo ninguna. Me apasiona más esto y moverme por el país”.

En medio de los escándalos de Penta y Soquimch, ¿cree que muchos de esos recursos podrían haber ido a acciones deportivas como las que lidera…?

“Con los Penta en estricto rigor, no, porque uno de los dueños (Carlos Alberto Délano) era de Universidad de Chile, opositor a nuestra gestión en la ANFP, me lo dijo en un almuerzo. Me indicó: ‘¿Así que te gusta distribuir la plata a todos por igual?’, ‘sí’, le respondí, que eso era equidad para que la industria creciera. Y él me contestó que ‘no, con la plata de otros es fácil distribuir’, bien pesado. Me quede callado un rato y le planteo que si estaba jugando Copa Libertadores y si le pagaban lo mismo que a los bolivianos o Boca Juniors más y me responde que sí, pero que esa era una competencia internacional. ‘ah, le respondí, ya sé cuál te gusta a ti’.Obviamente, se enojó conmigo”.

¿Qué le provocó que años después estuviera sentado en un tribunal?

“No, esas cosas no me agradan, no me alegro de la desgracia ajena y con Soquimich sí hemos hecho proyectos de responsabilidad social en María Elena y haremos otro en Tocopilla, pero sin necesidad de hablar de política”.

La crítica que puede surgir es ¿con qué objetivo o finalidad se le apoya…?

“Nos llevaron a María Elena a hacer un proyecto deportivo puntual, lo hicimos, estuvo el alcalde y hubo un informe”.

Con el libro de los arcos que publicó ¿quiso demostrar lo mala que está la infraestructura deportiva en Chile?

“No, al revés, hay de todo, esto se me ocurrió cuando era presidente de la ANFP y fui descubriendo que se podía mostrar el país, a través de canchas de fútbol”.

Sentido de madurez

¿Nunca pensó en escribir un libro con el episodio de su salida de la ANFP?

“Nunca me imaginé que lo que sucedió ahora iba a ocurrir. Suponía que habría un desorden, pero esto pasa los límites. Lo pensé. Me llamaron de una editorial y me ofrecieron un contrato y me pagaban plata por adelantado, hasta me sentí un best seller. Pero después dije, quiero hacer tantas cosas y cuando escriba, tengo una sola manera, contar las cosas como fueron y me voy a ganar tantos enemigos que mejor no”.

¿Porque tocaría a intocables?

“No, no me asusta tocar intocables, ese no es el tema, lo que pasaba es que iba a describir actitudes de gente que no le serían beneficiosas en su vida diaria”.
-En este actual escenario de crisis total, ¿no le dan ganas de retornar a la ANFP?
“Se dan varios factores, pero cuando no nos reeligen en diciembre de 2010, y hoy día estamos a 2015, son cinco años, en los que uno está más viejo y más ‘mañoso’ y eso me coloca el primer freno. La energía no es la misma. Cuando era chico iba al cine con varios amigos y sus padres y no me acuerdo si fue ‘Incendio en la Torre’ o ‘Tiburón’ y cuando salimos digo‘qué buena la película y ojalá que hagan la segunda parte, pero uno de ellos señaló: ‘nunca segundas partes son buenas’ y no se me olvidó nunca más. Si uno quiere volver, va en contra de algo que tengo incorporado, por que aunque quisiera volver, me costaría, no será lo mismo y es porque el final de la película uno ya lo conoce, hagas lo que hagas, igual para afuera”.

Transparencia total

¿Cree que muchas cosas irregulares se taparán con el logro de la Copa América alcanzado el 2015?

“Ahí hay que ser justo, la Copa América, los jugadores y cuerpo técnico cumplieron su objetivo y la lograron. Los dirigentes cumplieron su objetivo. Ahora si en esta organización se descubre que para conseguir el objetivo hubo cosas que no debieron haberse hecho, no se pueden callar. Y si se descubre que en lo previo y post de la Copa América hubo cosas ilícitas tampoco se pueden callar. Hay que llevarlo a los tribunales de justicia, de lo contrario se es cómplice “.

El tema es que en Chile la imagen de una persona renunciando, como Jadue, y viajando a Estados Unidos sería signo de culpabilidad…

“Si llego un día jueves y anuncio que no pasa nada y bastante prepotente al enfrentar los medios de comunicación digo que fue un invento y que en la noche iré al partido (Colombia) y al final no voy y presento una licencia por 60 días y la próxima semana, en vez de estar con la selección en Uruguay, me estoy yendo a Miami es difícil hacerle entender que no pasó nada en estos seis días”.

En su caso ¿tiene claro el cuadro?

“Me gustaría tener más información y a todos”.

De inmediato se relaciona con las denuncias de corrupción de la FIFA…

“Eso es lo que más menos uno deduce. Entiendo que alguien se quiere ir de vacaciones a Miami, pero irse seis meses no es tan fácil, porque tiene que vivir, pero de lo que uno sabe, él vivía de lo que le daba el fútbol”.

¿El tema estaría viciado desde el momento que lo sacaron y luego asumió Jorge Segovia?

“A mí no me sacaron, perdí una elección”.

Pero al final había un grupo que no quería que estuviera en el cargo…

“Pero eso es parte de la democracia”.

El tema es que Segovia también se fue del país y luego asumió Sergio Jadue…

“ Es sintomático que los dos presidentes que me reemplazaron terminen, uno al menos, sin querer volver al país, porque nunca se ha sabido que Segovia quiera volver a Chile y no sólo eso, con negocios en el país y medio escondido y el otro (Sergio Jadue) haya salido de esta manera. Ahora son cosas distintas, porque Segovia fue más bien por la negociación para obtener la acreditación y el tipo utilizó malas artes para obtener ese beneficio”.

¿Su visión es que quienes lleguen a la ANFP no debieran mezclarse con los negocios particulares?

“ Es que me cuesta entender que ese sea el fin. Para qué vas a llegar a la ANFP a hacer negocios. Uno llega para tratar de desarrollar el fútbol”.

Daño a la confianza

¿Con este escándalo retrocede el fútbol chileno?

“Sí, en todo, en imagen, en desconfianza, credibilidad en una cosa que es básica, en el salir a la calle y hablar que yo soy del fútbol. La primera reunión con la Presidenta Bachelet fue para ofrecerle ser la presidenta honoraria del mundial juvenil de femenino y ella me contesta una cosa que fue sintomática, ‘aquí en La Moneda todos me dicen que no me meta con la gente del fútbol, pero, sabe, yo les creo a ustedes y lo apoyaré’, esa es la sensación que tiene que haber hoy día de nuevo. Si hacemos una encuesta, salimos para atrás, sale manchado porque los dirigentes del fútbol no supimos controlar la actividad”.

¿Teme que nuevamente renuncie el entrenador y Jorge Sampaoli abandone la dirección técnica como lo hizo Marcelo Bielsa cuando usted perdió?

“No, porque ahí hay un error histórico. Nosotros nos vamos un 11 de enero, por el 21 de enero Chile juega un amistoso con Estados Unidos y esa selección la dirige Bielsa y estaba Jadue (Sergio) de presidente y en febrero se reúnen para ver cómo podrían trabajar y algo tiene que haber pasado entre ellos y determinan no seguir, pero no es que se vaya el día que me fui yo”.

¿Sería un error estratégico que Sampaoli se fuera?

“Claro, sería tropezar de nuevo con la misma piedra, aunque por acciones distintas. A mí me ganaron una elección, pero aquí no. Hay un tema mucho más profundo que perder una elección”.

¿El futuro del CDF seguiría siendo la piedra de tope de los conflictos?

“Si fuese así, no entiendo por qué Jadue está en Miami si allá no llega el CDF, no digo que no sea, porque no tengo más información. Hay que ser cuidadoso”.

¿En su caso personal no ha querido entregar una opinión concreta del conflicto o dejará que decante?

“Soy periodista y me gusta tener la información, pero los años me han hecho ser cauteloso. Si empiezo a preguntar mucho van a decir que quiero volver y yo no tengo ninguna intención”.

En su caso ¿salió de la FIFA antes que estallaran los escándalos?

“Me salí en mayo del 2012 justamente por esto, tenía que estar en la organización de los juegos olímpicos y Jadue (Sergio) y Ruiz-Tagle (Gabriel) le hicieron ver a la FIFA que ellos no apoyaban que yo estuviera en la organización y me dijeron que para estar acá tienes que hacer las paces con Jadue y Ruiz-Tagle y yo no estaba dispuesto a mantener un trabajo y transar principios. Por lo tanto, no y me voy”.

¿Fue lo mejor por lo salpicado que está hoy el organismo?

“No, porque dejé de tener trabajo, ¿a quién le hacen un favor cuando uno pierde un trabajo?, a nadie”.

¿Se tentó cuando se indicó que quería ser presidente de la FIFA?

“Estaban las condiciones, pero si es que la Federación chilena me hubiera apoyado. Lo más probable es que hubiera sido candidato, no sé si hubiera ganado, pero ahí Jadue dijo que no y hasta ahí llegué”.

“Nunca he sido investigador privado”

Hay quienes se resisten a pensar que usted, siendo funcionario de la FIFA, no sabía nada de los manejos irregulares que después se descubrieron…

“Está bien, pero yo nunca he sido investigador privado ni detective, no tengo acceso a nada. Con la información que tenía trabajaba y tampoco andaba buscando. Lo mismo me preguntaban del fútbol chileno, cómo no sabías. Para ello uno tiene que ser parte de…, como nunca he sido nada. Si uno se guía por los rumores que escucha es poca la gente que no queda salpicada”.

¿Le sorprendió que en medio del interés por llegar a la FIFA se le sacara en cara una denuncia por supuesto tráfico de influencias?

“Si hay que partir por algo, parto yo porque nunca debí haber mandado un correo. Si no lo hubiera mandado no pasa nada. Lo hice en la inocencia de pensar si un niño pudiera entrenar 15 días en una parte. Si mis hijos más pequeños jugaran bien fútbol y llamo al diario para saber si me pueden conseguir que los prueben en La Serena, no veo dónde está el acto de corrupción o conflicto de intereses. Es como si mañana me voy a de vacaciones a Qatar y no puedo porque estuve (en el proceso)”.
 

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Fuente: diarioeldia.cl