Las familias del sector de Baquedano, en Coquimbo, afectados por el terremoto y posterior tsunami, comienzan a ver una luz de esperanza luego de haber recuperado el suministro eléctrico, mediante una instalación eléctrica provisoria que les entrega mayor sensación de seguridad en medio de la catástrofe.
En el lugar se instaló un sistema básico de emergencia, que consiste en dos ampolletas y dos enchufes en el interior de las viviendas dañadas.
El Subgerente de CONAFE, Rodrigo González, precisó que si bien la distribuidora no tiene la obligación de ingresar a los domicilios, “en virtud de esta catástrofe queremos ayudar a las personas de manera de que puedan tener suministro y estar más gratos en sus casas. En este sentido estamos apoyando con soluciones seguras para que por lo menos que tengan luces y enchufes”.
La empresa eléctrica ha visitado todas viviendas ubicadas en esta zona, la más golpeada por el tsunami. Ha ido en compañía de instaladores eléctricos autorizados por la SEC con los cuales han ido chequeando la situación eléctrica casa por casa. En aquellas donde los daños no permiten dejarla con energía, se entrega este sistema básico de emergencia y se explica al morador que no puede intervenirlo.
Sin embargo, se detectaron algunas viviendas que han manipulado este sistema básico ampliando las instalaciones entregadas por CONAFE, lo que constituye un serio riesgo para la seguridad de sus hogares.
El director regional de la SEC, Carlos Herrera, indicó que junto con la fiscalización del organismo para certificar que las conexiones se encuentran en perfectas condiciones, se emitió una resolución para autorizar esta instalación provisoria con menores tiempos de espera para la conexión. De todos modos, Herrera hizo un llamado a las personas de este sector “a que eviten modificarla con alguna persona que no tengan los conocimientos”.
Fuente: diarioeldia.cl