Se trata de una tradicional festividad religiosa chilena, que pese al correr de los siglos, la comunidad católica mantiene y cuida celosamente.
Se trata de la Fiesta en homenaje a la Virgen del Carmen, la que se desarrolló en La Serena en medio de las muestras de cariño de la ciudadanía y de las manifestaciones artísticas que fueron preparadas con dedicación y mucha fe, de tal forma que todo estuviera a punto cuando la Señora recibiera los honores.
Todo partió a las 16:00 horas tras la celebración de una ceremonia religiosa en la Iglesia San Agustín, ubicada en calle Cienfuegos y a pocos pasos de La Recova.
Durante la misa, Monseñor René Rebolledo llamó a la comunidad serenense a confiar en la Madre de Dios, destacando el valor de una celebración que forma parte central de la vida cristiana y que no pierde vigencia bajo ninguna perspectiva. Pidió además a la Virgen del Carmen acompañar a la comunidad en su diario vivir y llamó a todos los católicos a creer en su poder maternal y en el enorme amor por sus hijos.

EN LAS CALLES. Ya finalizada la ceremonia religiosa efectuada en la Iglesia San Agustín, comenzó el recorrido por las principales calles de la ciudad, donde la mayor concentración popular ocurrió en calle Prat, frente a la Intendencia Regional, donde la comunidad que transitaba por el lugar y muchos que se prepararon para ver la procesión disfrutaron de una manifestación siempre colorida y marcada por la presencia de niños y jóvenes.
Fue posible observar bailes religiosos diaguitas, en homenaje a la Señora de Guadalupe, de los Guardianes de San Pedro, de la Compañía Baja de La Serena en honor a María, a Santa Teresa del Niño Jesús, Bailes religiosos mapuches y los tradicionales bailes chinos, que lucen sobre todo en los festejos para la Virgen de Andacollo.
Tras toda la procesión de baile, color, religiosidad y fe sin límites, iba la imagen de la Virgen del Carmen, la que era acompañada por Monseñor René Rebolledo, junto a miembros del Ejército y Carabineros y toda la comunidad católica serenense. En ese momento, la Señora recibió muestras de afecto, al igual que Monseñor, quien se veía contento de saludar a quienes decían presente. La actividad finalizó con una cantata en homenaje a la Virgen.

EN DIVERSAS PARTES. Andacollo efectuó su propio homenaje y procesión, a cargo del padre Eduardo Huerta, rector del Santuario Mariano, lo que atrajo gran cantidad de fieles de la comuna minera.
En tanto, la parroquia San José Obrero del sector La Antena también efectuó su propia celebración, en la localidad de Ceres. 

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Fuente: diarioeldia.cl