Por más de 10 años la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y el ministerio de Obras Públicas (MOP) estuvieron dialogando para que se pudiera concretar mejoras al Reglamento de Contratos de Obras Públicas (DS-75), el que resulta fundamental para que las empresas puedan acceder a las licitaciones que dispone la cartera en materia de infraestructura, cambios que ahora comienzan a regir tras la publicación en el Diario Oficial el pasado 29 de agosto.
Por ello, la medida es ampliamente valorada en el gremio, pues se considera que se transformará en un incentivo a las empresas regionales para que sean parte de los llamados de propuesta pública generando valor local. En este sentido, el presidente de la CChC La Serena, Martín Bruna, indicó que “valoramos la modificación que realizó el ministerio de Obras Públicas al Decreto Supremo Nº 75 que regulaba los Contratos de Obras Públicas, ya que impulsa la actividad económica regional a través de obras de infraestructura. Asimismo, abre espacios para que las pequeñas y medianas empresas inscritas en el registro del MOP participen en las licitaciones públicas”, aseveró.
En efecto, entre las principales modificaciones, se encuentra que ahora las empresas de menor tamaño podrán conformar consorcios y, con la unión de ambas, generar una espalda financiera suficiente para el desarrollo de las obras, también puede generar la unión del capital humano y tecnología. “Una de las cualidades de este nuevo lineamiento, a través del cual el gremio trabajó estrechamente con la cartera, es que permite la formación de consorcios, lo que permite complementar capacidades técnicas y capacidad económica”, acentuó Bruna.
Así, podrán postular incluso a obras de mayor envergadura, que mandate el MOP, permitiendo que un contratista inscrito en tercera categoría participe en llamado de segunda categoría, pero hasta un monto que no supere el 30% inferior del nivel superior. Asimismo, se extiende el techo por obra de 180 mil UTM ($8 mil millones) a 480 mil UTM ($21 mil millones).
Según cálculos de la CChC, esto da pie para que las empresas regionales puedan acceder a una cartera futura de alrededor de $138 mil millones que dispone el MOP en la zona, donde considera proyectos de las direcciones de Arquitectura, Obras Hidráulicas, Obras Portuarias y Vialidad.
A juicio de Bruna, con ello se podría generar una cadena productiva local -empleo y proveedores- y acceder a construir obras emblemáticas como el Estadio de Vicuña, la Biblioteca Regional, plantas desalinizadoras, costaneras y embarcaderos. “Entre las principales implicancias que tendrá este nuevo proceso de postulación a obras de infraestructura pública, está la competencia al mercado regional, pues elevará el número de actores involucrados y se fomentará la participación de firmas locales”, puntualizó.
Por su parte, la seremi del MOP, Mirtha Meléndez, explica que, en el fondo, el beneficio más grande es a nivel regional, pues por muchos años pasó que las empresas locales no se veían beneficiadas por todas las licitaciones que se hacían en la zona. “Ahora la capacidad técnica y económica de los contratistas se mejoró y eso va a potenciar enormemente la actividad regional, porque dos empresas chicas del registro de obras menores pueden hacer un consorcio y postular a proyectos de la categoría de obras mayores”, precisó la autoridad.
Lo que también sucedía, sostiene Meléndez, es que también cuando se licitaban obras por ciertos montos se tenía que ir a un registro especial, que ahora subió a 480 mil UTM. “Con esto por ejemplo se podrían ver beneficiados proyectos como el camino Soruco a Manquehua, que es un proyecto que superaba los 16 mil millones de pesos, lo que sucede ahora es que queda en el rango de los proyectos que se pueden licitar sin el registro especial y se pueden hacer de forma normal”.
Esto viene como respuesta, dice la secretaria regional, a una mirada de descentralización, de justicia territorial y, sobre todo a darle más movimiento a las Pymes. “Para que nuestras constructoras medianas y pequeñas puedan tener una oportunidad en todas estas licitaciones que nosotros hacemos y la gente que se contrate podrá ser de la misma región”.
Otro beneficio, agrega la seremi, es que se evitará que lleguen empresas foráneas que luego quiebran y dejan las obras abandonadas, como ya ha ocurrido en varias ocasiones en nuestra región. “Llegan estas empresas grandes que engañan a todo el mundo y después se van y dejan todas las deudas, pero en este caso serán empresas regionales, que las conocemos, que tienen mano de obra local y mueven los servicios locales”, puntualizó.
Fuente: diarioeldia.cl